Patricia es profesora. A dos semanas de que empiece el curso escolar aún no sabe si va a trabajar. "Estamos sin saber dónde tenemos que ir de un día para otro, con la maleta casi siempre preparada a la espera de que me llamen", lamenta.
De septiembre a junio, Patricia ha llegado a tener cinco contratos y cada uno de ellos en una provincia diferente de Andalucía.
Aurora, enfermera en Santiago de Compostela, acumula 11 años de vida laboral y más de 300 contratos. En los dos últimos meses ha firmado unos 40 y explica que estos pueden llegar a ser contratos de un día solo, o de dos.
Su caso, lejos de ser una excepción, no es el único. "Hay gente que llega a tener 900 en 12 años con las oposiciones aprobadas", asegura.
Más del 28% de los empleos públicos son temporales, por encima del sector privado, donde los eventuales no llegan al 26%. La cifra se dispara entre los trabajadores públicos menores de 40 años: más de la mitad no son fijos.
Inestabilidad que según los sindicatos, repercute en los servicios públicos. "Lo que prima realmente es el ahorro antes que la calidad asistencial", indica Xosé Manuel Marcote, delegado de CiG Saúde.
Precariedad consecuencia de la crisis. En época de recortes, apenas se convocaron oposiciones y no se cubrieron las plazas de los funcionarios jubilados. "Si se recortan los presupuestos lo que pasa es que hay menos profesionales", sentencia Marcote.
Temporalidad en el sector público, especialmente acusada en Sanidad y Educación. El 37% de los profesionales sanitarios y el 26% de los docentes son trabajadores eventuales.
