Marck Zuckerberg ha perdido más de una cuarta parte de su fortuna en una sola tarde. "¿Estaría cómodo compartiendo con nosotros el hotel en el que se alojó anoche?", ha preguntado Dirk Durbin, senador demócrata por Illinois, a Marck Zuckerberg. "No", contesta Marck Zuckerberg, fundador de Facebook.

Su fundador no quería compartir sus datos, y esta es la paradoja de Facebook. La regulación de la privacidad es la que ha llevado a la compañía a perder 102.380 millones de euros, un 19% por ciento del valor de sus acciones. Es como ver desaparecer en horas casi todo lo que produce la Comunidad Valenciana en un año.

"Facebook ha sufrido la mayor caída de su historia y además se pone en cuestión su modelo de negocio y se pone a la compañía en jaque tal y como la conocemos hoy en día", asegura Javier Flores. Sus acciones bajaron más de 41 dólares en tiempo record y Zuckerberg se deja 14.400 millones de su fortuna personal valorada en 60.000.

El escándalo de la filtración de datos y la nuevas normas europeas de privacidad les puede hacer daño, y lo reconocieron, porque cuanto menos sepa Faceebook de sus usuarios, menos atractiva será para los anunciantes. ¿Funcionará entonces? "Es una duda que tenemos porque todos sabemos que muchas de estas empresas han estado jugando al límite en cuanto al uso de información, lo que es pasar datos", explica Roberto Casajuana, economista de SLM.

Aunque el numero de usuarios ha crecido un 11%, en Europa ha perdido 3 millones tras saberse que filtró datos. Un cambio de tendencia que pone en cuestión el modelo de gestión y de negocio de un gigante que hoy es más pequeño.