Algunas de las imágenes que están dejando las protestas de los taxistas, como lanzar huevos y proferir insultos durante una acto en conmemoración del Holocausto, o colapsar las calles de Madrid, están dañando la imagen del sector de cara a la ciudadanía.

"Tienen que empezar a entender que tienen derechos legítimos que defender, pero dentro de la ley", ha apuntado en declaraciones a Al Rojo Vivo José Manuel Rodríguez Uribes, delegado del Gobierno en Madrid. Los populares, objetivo principal de sus protestas, no creen que sea la manera para alcanzar acuerdos.

"La actitud radical y violenta de una parte del sector hace esta situación intolerable", ha lamentado Marta González, vicesecretaria de Comunicación del PP. Además, han denunciado amenazas como las que se escucharon en Sol: "Garrido, dimisión; esta noche, mira bajo el coche".

Los portavoces del sector aseguran que son acciones minoritarias y no promovidas por sus discursos. "Las consignas que mando a mis compañeros son para que se mantengan animados, no para llamar a la violencia", ha asegurado Saúl Crespo, portavoz de la plataforma taxista Caracol, en Más Vale Tarde.

En esta línea, insisten en que son hechos puntuales que no pueden desviar la atención de lo que son sus légitmas reclamaciones. "Esas son sus armas. Quien tenga dos dedos de frente debe saber que lo que pedimos es justo", ha asegurado el portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez. Se reafirman en que, frente al ataque de los políticos, tienen que tienen el apoyo de la clase trabajadora.