Centenares de taxistas han llegado a la calle Génova, después de ser desalojados del Paseo de la Castellana, donde se han vivido momentos de tensión y ha habido varios heridos leves, donde permanecían acampados desde este fin de semana, y han cortado esta calle al grito de "corruptos" y "Garrido, dimisión".

Allí, frente a la sede del Partido Popular, han permanecido concentrados, coreando proclamas contra el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, el responsable de llevar la negociación sobre la regulación del taxi y las VTC.

Esta concentración sí ha estado autorizada por la Delegación de Gobierno de Madrid, a diferencia de la que han desarrollado en las últimas horas entre la plaza de Colón y la glorieta de Emilio Castelar.

Los taxistas se han concentrado durante toda la tarde en la Puerta del Sol, en frente de la sede del Gobierno regional. Los participantes en la protesta han pedido la dimisión del presidente regional, Ángel Garrido, y han coreado consignas como "Ni un paso atrás", "Somos taxistas, no terroristas", "En esta historia, hay puertas giratorias" o "Más regulación, menos corrupción".

En la concentración han ondeado banderas de distintas regiones como Andalucía, Asturias, el País Vasco o la Comunidad Valenciana, desde las que se han desplazado taxistas para apoyar las movilizaciones de sus compañeros en Madrid.

Junto al kilómetro cero de las carreteras nacionales radiales, los taxistas también han tocado pitos y bocinas y han tirado petardos y bengalas. Tras la concentración, los taxistas se han movilizado por la calle de Alcalá en dirección al estadio Wanda Metropolitano, donde se celebrará una asamblea.

Los taxistas ya han llegado a WiZink Center, Palacio de los Deportes, gritando "corruptos" y lanzando huevos hacia la sala en la que se encuentran la portavoz del PP de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que asisten a un acto en recuerdo del Holocausto.