Hablan los propios repartidores tras la sentencia contra Deliveroo. "Te asignan los pedidos, te controlan los tiempos... todo lo que está relacionado con la actividad lo gestionan ellos, nosotros lo único que hacemos es aportar el vehículo y el teléfono", explica Manuel Cabo, exrepartidor.

Por eso, cuentan los 'riders', no podían ser considerados como autónomos, como finalmente ha sentenciado un juez. El fallo recoge que incluso la propina la gestionaba Deliveroo, según detalla Marco Llerena, secretario nacional de Intersindical Valenciana

Las instrucciones a los 'riders' iban incluso más allá. "Tenían que llamar a la puerta, decir 'le traigo el pedido Deliveroo', despedirse con una fórmula determinada, quitarse el casco al llegar a un restaurante, no entres con la maleta...", enumera Esther Comas, abogada del Colectivo Ronda.

Como falsos autónomos, la empresa se ahorraba pagarles las cotizaciones a unos repartidores que tenían que asumir todas las cuotas cobrando unos tres euros por pedido. Así, para que le compensara, un rider tenía que llevar a cabo mensualmente "entre 350 y 400 pedidos", según Manuel Cabo. "Si no, entre IVA, IRPF, cotizaciones de la Seguridad Social y demás realmente es que no te queda nada", explica.

Los repartidores creen que la reciente sentencia de Madrid ayudará a cambiar el modelo laboral de estas empresas en todo el país y esperan que sea "un punto de inflexión para acabar con los falsos autónomos", en palabras de Nuria Soto, portavoz de Riders X Derechos.

Deliveroo, pro su parte, se defiende alegando que sus repartidores son autónomos por la autonomía que, dice, tienen los 'riders'.