El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, advierte de que "no se debe infraestimar" las tensiones inflacionistas y su persistencia e insta a los gobiernos a tener una política fiscal "prudente".

Así se ha manifestado en un encuentro del sector financiero organizado por Deloitte, Sociedad de Tasación y ABC. El vicepresidente del BCE destaca que "gran parte de los problemas que estamos viviendo son consecuencia de una inflación que es mucho más persistente, más elevada" y "no transitoria de lo previsto anteriormente".

Para Guindos, la reducción de la inflación es "la principal aportación" del BCE a la recuperación económica y la estabilidad financiera. Guindos indica que el BCE actualizará sus proyecciones de inflación en diciembre y avanza que mostrarán "un perfil en el cual la inflación continuará en torno a los niveles actuales, del 10%, en los próximos meses" y empezará a desacelerarse en primer semestre de 2023.

Posible recesión

También señala como "muy posible" que en el cuarto trimestre de este año o en el primero del próximo ejercicio se produzca un crecimiento negativo, con la posibilidad de una recesión técnica que "hace seis meses ningún analista veía". En este contexto, insta a los gobiernos a adoptar una política fiscal "prudente", que se compatibilice con la política monetaria de subida de tipos de interés para frenar la inflación. Insiste asimismo en que sea "mucho más focalizada" en los colectivos vulnerables y "temporal".

Además, Guindos incide en que la situación de los hogares ahora es "más vulnerable" que hace un año, el ahorro se está reduciendo "de una forma cada vez más intensa" por el repunte de la inflación, el consumo se está enfriando, la intención de compra de vivienda en la zona euro se ha reducido "de forma bastante notable" y el mercado laboral "está aguantando perfectamente", aunque puntualiza que la desaceleración económica "llevará a una desaceleración de la demanda del mercado de trabajo", si bien será distinta a la de la crisis financiera.

Subida de los tipos

Sobre la política monetaria, Guindos asegura que continuará la senda de subida de los tipos de interés hasta llegar al nivel de precios objetivo del BCE, del 2%, y recalca que esta política está en un proceso de "normalización" tras la etapa de tipos negativos. Como consecuencia de estas subidas, señala que la rentabilidad del sector financiero se va a incrementar, pero llama nuevamente a no dejarse "cegar" ni "llevar" por eso porque será una mejora "puntual" y "temporal". "Y aunque no sea así, es mucho mejor prevenir que curar", añade.