La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Economía, Comercio y Apoyo a la Empresa, Nadia Calviño, ha avanzado este viernes que, además del impuesto extraordinario a las compañías energéticas, también se revisará el impuesto a la banca "teniendo en cuenta que las circunstancias han cambiado" y ya no se está ante el mismo escenario de tipos de interés.

"Me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar algunos los parámetros en el nuevo escenario en el que estamos, en el que ya no hay esa subida tan rápida de los tipos de interés y esa subida tan rápida de los precios de la energía. Tenemos que ver si esos dos impuestos hay que hacer algún ajuste o no", ha apuntado Calviño en una entrevista en Antena 3.

Calviño ha defendido que el Gobierno "hizo muy bien en poner esos impuestos en ese momento". "Creo fue una buena decisión. Igual que ahora me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar (...) Siempre lo hemos dicho, que íbamos a hacer el análisis de esos dos impuestos para ver si hay que mantenerlos de cara al futuro y con qué parámetros, de cara a que sigan teniendo el mismo impacto positivo desde el punto de vista de la recaudación y desde el punto de vista económico", ha añadido.

Ambos impuestos se habían planteado como algo temporal, para dos años, que según el ministerio de Hacienda permitiría una recaudación de 2.900 millones de euros, por circunstancias especiales con los precios disparados de la energía, el gas, el petróleo y la subida de los tipos de interés. Muchos beneficios para la banca y las energéticas sobre el que se puso etre gravámen. Ahora la situación econonómica ha cambiado y los precios ya no están tan disparados.

Mientras, los socios de Gobierno apuestan por mantener ambos impuestos extraordinarios durante todo 2024. Señalan que habría que mantener lo pactado en el acuerdo de coalición, en el que se refleja que habría que mantenerlo y en todo caso revisarlo en el último trimestre de 2024. "Revisarlo para readaptarlo y mantenerlo", dicen en Sumar , para que esos sectores sigan contribuyendo a la justicia fiscal en España.

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se ha pronunciado "totalmente en contra" de eliminar estos impuestos. "La banca y las energéticas tienen importantísimos beneficios" ha incidido señalando ademñas que reciben "fondos públicos de los españoles y las españolas a través de los pertes en nuestro país".

Posiciones "distantes" sobre la reforma del subsidio por desempleo

La líder de Sumar también ha reconocido que, en este momento, las posturas en el Gobierno sobre la reforma del subsidio por desempleo están "distantes", pero confía en llegar a un acuerdo con el PSOE, avisando de que no sería "tolerable" un "recorte".

Antes, Calviño había asegurado que esta recorma "no es una cuestión" de los Ministerios de Economía o Trabajo, sino que "afecta muy directamente a Seguridad Social y a Hacienda". Díaz ha admitido posiciones "distantes" y ha asegurado que el Ministerio de Trabajo y Economía Social "no va a compartir un recorte de los derechos de los trabajadores".

Así, ha afirmado que la propuesta del Ministerio de Trabajo es la de a seguir "defendiendo a los trabajadores" y ha insistido en que no van "a compartir "ningún recorte". Según ha indicado, el Servicio Público de Empleo tiene un superávit fiscal de 5.700 millones de euros y cree que no hay nada que "justifique un recorte a los trabajadores" y no sería, en estos momentos, "tolerable teniendo superávit".

Yolanda Díaz ha afirmado que ha negociado con la Comisión Europea esta reforma del subsidio y se debe "cumplir con ella". Según ha insistido, mantienen una "diferencia importante" en el modelo de protección social con el PSOE y ha mostrado su deseo de que finalmente puedan llegar a un acuerdo. "La propuesta que ha hecho el Ministerio de Trabajo cumple con lo que hemos remitido a Europa", ha indicado.

Según ha señalado, un gobierno de coalición progresista "no se puede plantear recortar los derechos de los trabajadores".