El Ministerio de Fomento asume la gestión de otras dos autopistas de peaje, la AP-7 Cartagena-Vera y la AP-7 Circunvalación de Alicante, de las nueve de las que se hará cargo por la quiebra de sus concesionarias.

Con estas dos autopistas, que serán gestionadas a través de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (Seittsa), ya son cinco las que revierten al Estado, que asume su explotación y el mantenimiento como consecuencia de la liquidación de sus sociedades concesionarias, que se encontraban inmersas en un procedimiento concursal.

La AP-7 en el tramo comprendido entre Cartagena (Murcia) y Vera (Almería) y la Circunvalación de Alicante se suman a la R-4 entre Madrid y Ocaña (Toledo), la R-2 entre Madrid y Guadalajara y la AP-36, que discurre entre Ocaña y La Roda que ya han revertido a la empresa pública Seittsa.

El pasado 24 de enero, el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid dictó sendos autos en los que aprobaba los planes de liquidación de Ciralsa y Aucosta, las dos sociedades concesionarias que explotaban estas dos autopistas, y estableció el 1 de abril como fecha de cese de actividad de las concursadas.