En un comunicado, Fitch explica que la mejora se debe a la consolidación fiscal que está llevando a cabo el país y a las "significativas reformas" realizadas por el Gobierno en el mercado laboral, en el sistema de pensiones y en el sector financiero.

Estas reformas, aunque van a ir disminuyendo en el periodo 2014-2015, van a permitir a España lograr "un crecimiento más seguro", ha dicho la agencia.

La calificadora de riesgos destacó que España ha mejorado la aplicación de sus políticas en el periodo 2012-2013 y ha logrado reducir el déficit en 2,5 puntos porcentuales.

Asimismo, Fitch ha tenido en cuenta los progresos cosechados en la reestructuración del sector bancario desde 2012, así como el ajuste de la balanza de pagos española a un ritmo maor del previsto, reflejando la fortaleza de las exportaciones y las ganancias en competitividad de la economía española.

Fue en mayo de 2010, cuando Fitch retiró la máxima nota de solvencia a España, la triple A. Un año antes, en enero de 2009, se produjo la primera bajada de nota por parte de Standard&Poor's.