Ferrovial ha acumulado su fortuna sin pagar impuesto de sociedades en España desde 2020, en los últimos tres ejercicios. Lo ha hecho declarando pérdidas y generando créditos fiscales.

Es decir, ha presentado números rojos y Hacienda le permite compensar el pago de este impuesto en ejercicios futuros.

Pese a este contexto, el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, señala que lo que Ferrovial ha contribuido a las arcas públicas con sus impuestos son 282 millones, pero eso incluye cuestiones como el IVA o las retenciones del IRPF. En realidad, el pago neto total son entonces solo ocho millones de euros.

Aún así, Garamendi, elogia la contribución de Ferrovial a la riqueza de España. "La familia Del Pino son grandes empresarios y creadores de riqueza de España, ojalá hubiera más", dice.

Añade además críticas al Gobierno, del que asegura que no entiende su dinámica: "Es una situación absurda, peligrosa", y augura que "va a generar desconfianza."

Pero desde el Ejecutivo recuerdan el origen de los beneficios de Ferrovial. Desde que gobierna Pedro Sánchez, en 2018, la compañía ha ganado en contratos públicos 1.014,9 millonesde euros. Desde 1991 esta cifra asciende a los casi 9.000 millones de euros.

"Es la tercera o cuarta fortuna de España y, evidentemente, en buen medida esa fortuna se ha hecho gracias a nuestro país, a España, y a la contribución de los españoles", ha defendido el presidente del Gobierno.

Por eso, que Ferrovial no se marche de España es para Sánchez una cuestión de justiciafiscal, de "cómo queremos competir en el mundo". Para la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, existen entonces "más de mil millones de razones" para que Ferrovial siga manteniendo en nuestro país su sede social.

El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, en cambio, cree que es reprochable que Sánchez, en su opinión, "señale al presidente de la compañía". "En vez de insultar a las empresas, debería sentarse para ver cómo podemos hacer para que las empresas confíen en España y se queden en España", ha mantenido.