El restaurante de José Ramón empieza con ritmo frenético la Semana Santa. Tiene dos cocineros, pero necesita a otro. Ofrece más de 1.500 euros al mes, alojamiento y comidas incluidas, aunque no aparece nadie para el puesto. "Llevamos alrededor de quince días aproximadamente buscando, pero nada", dice el dueño.

En el restaurante de Joaquín trabajan cuatro personas, para Semana Santa y verano necesita diez empleados más. Desde ya busca, por ejemplo, camareros, pero aún sin suerte. "La media es siempre a partir de 1.000 euros, con seguro a jornada completa, manutención en el local y alojamiento", explica.

Es el problema de muchos lugares turísticos de nuestro país. "Tenemos ahora mismo censados 17.400 habitantes, y en verano pasan de 140.000", apunta Telmo Martín González, alcalde de Sanxenxo. Ante la llegada de miles de turistas se generan puestos temporales en la hostelería que quedan sin cubrir.

Los profesionales creen que con más centros de formación en hostelería se podría solucionar parte del problema.