La discriminación hacia los homosexuales hace que países como Rusia no suelan estar entre los destinos turísticos elegidos por el colectivo y ahora con la llegada de Donal Trump a la Casa Blanca, todo apunta a que Estados Unidos dejará de ser el país favorito. Este 2017 es el año de España.
España recibe más de seis millones de turistas del colectivo LGTBI cada año y esto supone unos ingresos anuales de 6.100 millones de euros. Casi un 40% más de lo que produce el turismo de negocios.
Y este 2017 aumentarán, las previsiones aseguran que las cifras serán todavía mejores, esperamos unos 8 millones de personas. Muchas de ellas aprovecharán la celebración en Madrid del World Pride.
"Es un reto para la ciudad muy importante", explica Alfonso Lliopard, presidente de la asociación AEGAL.
Estadounidenses, ingleses y franceses son los que más vienen a nuestro país a los que ahora se suman también los millennials gays chinos.
"En España no solo se les va a respetar sino que se pueden expresar libremente, pueden actuar libremente, van a encontrar un espacio de tolerancia y respeto pleno", cuenta Jesús Generelo, presidente FELGTB.
Un país gay friendly que quiere seguir apostando para que aquí todos los turistas se sientan como en casa.