El gobierno promete "una mejora de las pensiones mínimas y de viudedad", tal y como dijo Rajoy, y desempolva la medida aprobada por Zapatero hace siete años, y guardada en un cajón desde entonces, destinada a pensionistas como Loli y Gregorio.

Conviven con 835 euros de pensión. La de él, solamente, porque a ella, pese a sus 10 años trabajados y ninguno cotizado, le recordaban: "tú lo que tienes es estar fregando". Tuvo que quedarse a cargo del hogar y sus hijos.

En el mercado miran el céntimo y en casa, echan mano de las verduras que recogen de su huerto. "En invierno estamos comiendo judías que hemos envasado en verano".

Las viudas son otro de los colectivos más desfavorecidos. Su pensión media de unos 650€, un 40% menos que las de jubilación. Y en algunos casos, estas ayudas no llegan ni a los 500 euros. "A las viudas el Gobierno nos estafa muchísimo", explica una pensionista.

"Es una cuestión de justicia, el poder subir las pensiones mínimas y a las viudas", asegura Paca Tricio, directora gerente de la Unión Democrática de los pensionistas.

De aplicarse la medida, la pensión de viudedad subiría hasta los 750€ aproximadamente, es decir, 100 euros más entre 2018 y 2019.

Pero según algunas asociaciones, esto no es real. Solo unas pocas se verían beneficiadas, en la práctica la mayoría se quedaría con la misma pensión por los complementos.

"Estamos luchando porque no quiten el complemento de mínimos a las viudas", destaca Antonia Hernández, presidenta de la asociación ciudadana para los derechos de las mujeres.

En paralelo están los llamados 'jubilados activos', personas que siguen trabajando una vez jubilados. Una opción mediante la cual cobran por su trabajo más el 50% de su pensión y que muchos ven como una alternativa para no verse ahogados el día de mañana, tal y como ocurre a día de hoy.