En España cada vez se contratan más hipotecas de interés fijo. Gema es un ejemplo, y pasó de pagar 1.100 euros al mes a 1.750 en apenas dos años por culpa de una hipoteca a interés variable.
"Hubiera escogido una de interés fijo, que aunque mensualmente me hubiera costado un poco más, nunca hubiera subido 600 euros", asegura Gema García, afectada por no poder afrontar su hipoteca variable.
Según la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, se ha creado una conciencia social ante el miedo de no poder afrontar los pagos en el futuro. "Ha habido engaño y fraude en muchas de las hipotecas que se han concedido en este país, por eso existe una especie de 'sottofondo' de mucha gente que demanda sobre todo estabilidad", recuerda Javier Rubio, miembro de la comisión jurídica de la PAH.
Hay un cambio de tendencia claro, según explica Susana Rodríguez, socia directora de la Consultoría Aguirre-Newman: "Prácticamente un 40% de las nuevas hipotecas que se firman se hacen a tipo fijo cuando antes de la crisis este porcentaje apenas llegaba al 10%".
Pero cuidado con las ofertas híbridas, porque tal y como señala Manuel Pardos, presidente de ADICAE: "Son inventos de la banca para ganar más dinero, no para captar bien a los clientes".
Con una hipoteca media de 120.000 euros a 20 años, hoy la cuota mensual con tipo de interés fijo saldría unos 700 euros al año más cara que a tipo variable. Pero ojo, si volviéramos a los niveles del 2008, la variable se dispararía más de 3.000 euros.
"Ahora mismo con los tipos tan bajos, el precio es muy competitivo a tipo de interés fijo, y antes exclusivamente lo hacían en las personas que iban a hacer una hipoteca a ocho o diez años", cuenta Jaime Campos, director corporativo de marketing de Bankia. Las asociaciones insisten en que hay que asesorarse antes siempre de firmar.
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