El FMI ha publicado su 'Perspectiva Económica Mundial' con dos alertas que nos hacen mantener la alerta no solo para este año, sino para los dos años siguientes. Y es que, según Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del organismo, "lo peor está todavía por llegar".

Todavía no hemos visto todas las consecuencias de la guerra en Ucrania, que nos va a plantear tres inviernos muy complicados en 2022, 2023 y 2024. El peor será el último, según el informe del FMI, con una crisis que dejará a uno de cada tres países en recesión el próximo año.

Adelantándose, el Gobierno alemán ya ha anunciado una crisis económica con un posterior decrecimiento en los próximos trimestres. Mientras tanto, la inflación persistirá, motivo por el que el FMI pide a los bancos centrales que centren su política monetaria en reducirla.

Buscar un suministrador de energía alternativo a Rusia supondrá un reajuste en el panorama geopolítico que no será transitorio y cuya peor parte la sufrirá Europa. España es la que mejor parada sale de las economías de la Eurozona, siendo la que más crece.

Sin embargo, el FMI prevé un crecimiento mucho menor que el pronosticado por el Gobierno, algo a lo que Nadia Calviño ha restado importancia. Así, recortan en ocho décimas el crecimiento del PIB para 2023, situándolo en el 1,2%.