Dimisión en 'diferido' para algunos, dejarlo todo atado y bien atado para otros. El empresario Arturo Fernández recibió 94 votos a favor de su propuesta de marcharse de CEIM cuando convoque elecciones. Sin embargo, en la reunión de la CEOE de este miércoles el malestar era más que evidente.

El escándalo por los 37.000 euros que gastó con su tarjeta 'opaca' de Caja Madrid, y que asegura haber devuelto, no es el primero que salpica a Fernández. También su imputación en el 'caso Bankia' y la apertura de la investigación de la Fiscalía por el presunto pago en negro del sueldo de sus empleados.

Pero ni en los peores momentos le ha negado Rosell su apoyo. Algunas fuentes indican que Rosell no puede dejar caer a Fernández porque necesita los votos que el presidente de la patronal madrileña le garantizaría en las próximas elecciones de diciembre.