La crisis del coronavirus sigue cebándose con el empleo: el paro registrado ha aumentado en 282.891 personas inscritas en el mes de abril, marcado por las medidas de confinamiento y la parálisis de toda la actividad económica no esencial, que se mantuvo entre el 30 de marzo y el 9 de abril.

El número de desempleados registrados en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) aumentó en 7,97% respecto al mes de marzo, según datos ofrecidos por el Ministerio de Trabajo, que indica que la cifra total de parados alcanza las 3.831.203 personas. En abril, el SEPE abonó 5.197.451 prestaciones, un récord histórico.

El más afectado es el sector servicios, donde el desempleo se ha incrementado en 219.128 personas (un 8,76%); seguido por la industria, donde sube en 26.832 parados (8,92%) y la construcción, con 25.055 nuevos parados (7,84%).

Durante el estado de alarma se han destruido cerca de 948.000 empleos

Desde el 12 de marzo hasta finales de abril, coincidiendo con el estado de alarma por la crisis sanitaria, que entró en vigor el 14 de marzo, la Seguridad Social ha perdido 947.896 afiliados, de acuerdo con los datos del Ministerio de Seguridad Social.

En el mes de abril, la Seguridad Social perdió 49.074 inscritos, tras un nefasto mes de marzo con el peor dato de ocupación de su historia: 833.979 cotizantes menos que en febrero.

Más de tres millones de trabajadores en ERTE

Del total de afiliados, a 30 de abril, 3.386.785 estaban protegidos por una situación de suspensión total o parcial por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), lo que supone el 24,25% de los afiliados en el Régimen General. De ellos, 3.074.462 se encontraban en situación de ERTE por fuerza mayor.

Los sectores con más trabajadores afectados por ERTE son la hostelería y el comercio, en concreto los servicios de comidas y bebidas (726.137), el comercio al por menor (448.243), el comercio al por mayor (210.959) y los servicios de alojamiento (206.379).

La cifra de beneficiarios de prestaciones por desempleo se ha situado en 5.197.451, lo que se traduce en un incremento interanual del 136,56% y supone un récord histórico de prestaciones abonadas por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE),