El calor del verano y la sequía que conlleva obliga a controlar el consumo de agua. Vecinos de varios municipios de Pontevedra llevan a cabo la supervisión del consumo mediante fijaciones del límite de litros al día que pueden consumir, comprobando qué gasta cada vecino.

Este control se lleva a cabo en Anceu, Ponte Caldelas debido a que en esta aldea de Pontevedra no hay ninguna empresa encargada de leer los contadores del agua, lo que obliga a los vecinos a controlar su consumo de uno en uno.

En su caso, el límite de litros por día, como cuenta Miguel Díaz, de la Comunidad de Aguas de Anceu, es de 193 litros. Además, el depósito está conectado directamente al móvil con una aplicación y pueden ver desde casa si alguien ha superado ese límite.

"Normalmente al mediodía siempre se nota una bajada, que es cuando la gente empieza a cocinar y a usar el agua", detalla Carlos López (Comunidad de Aguas de Anceu). En caso de que un usuario haga un consumo irregular se le notifica, advirtiéndole que tendrá una sanción.

Al tratarse de agua de uso doméstico, si los vecinos quieren llenar sus piscinas o regar sus huertos tienen que tirar de sus propios pozos. En Anceu llevan ya años leyendo sus propios contadores y aseguran que los vecinos están muy concienciados.