A poco más de un mes de arrancar el año 2024, el Consejo de Ministros ha aprobado una nueva subida del salario mínimo interprofesional (SMI), de un 5%, hasta alcanzar los 1.035 euros brutos mensuales en 14 pagas. Pese a que se ha aprobado en febrero, esta medida tiene carácter retroactivo, por lo que todas las nóminas afectadas tendrán que incluir los correspondientes incrementos desde el 1 de enero.
El salario mínimo interprofesional es la cuantía mínima que un trabajador ha de percibir por una jornada legal de trabajo de 40 horas semanales. Aunque es el Gobierno el que lo regula, previamente tiene que haber un proceso de consulta con las organizaciones sindicales y asociaciones empresariales más representativas. En esta ocasión, la propuesta de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, era de subir un 4%, hasta alcanzar los 1.123 euros al mes. Los sindicatos, por su parte, pedían un incremento del 5% mientras que la CEOE veía conveniente un aumento del 3%.
Finalmente, el acuerdo al que llegaron todos los actores de la negociación fue precisamente la propuesta del 5%, un incremento que, en palabras de Pedro Sánchez, beneficiará a 2,5 millones de trabajadores, especialmente a jóvenes y mujeres. "Es la mejor herramienta para combatir la pobreza laboral y para la igualdad salarial", aseguró el presidente del Gobierno, recordando que desde 2018 el SMI ha subido más de un 50%, concretamente un 54,08%.
Lo cierto es que en las últimas dos décadas, el SMI se ha multiplicado por 2,5, pasando de los 460 euros de SMI en 2004, el primer año del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Las principales subidas del salario mínimo interprofesional han sido aprobadas durante Ejecutivos socialistas. Las dos más relevantes son las aprobadas en 2005 y en 2019: la primera, durante la era Zapatero, supuso un aumento del 11,5% (de 460 a 513 euros), aunque le siguieron tres años seguidas con mejoras de más de un 5% anual y una cuarta de un 4%. La segunda, ya en tiempos de Pedro Sánchez, supuso un incremento del 22,28%, pasando de 736 a 900 euros mensuales en 14 pagas.
Entre 2012 y 2017, con Mariano Rajoy al frente del Gobierno, no hubo apenas variaciones, salvo los últimos años del presidente popular. En 2016, el Ejecutivo de Rajoy aprobó una subida del SMI de casi un 8%, pasando de los 655 a los 707 euros mensuales; antes de salir adelante la moción de censura que llevó a Sánchez a la Moncloa, Rajoy propuso una última subida, de en torno al 4%, del SMI. En 2019, el PP tuvo que salir a asegurar que no tenía la intención de bajar el salario mínimo, después de que Pablo Casado asegurara, en una entrevista con Onda Cero, que situaría el SMI en 850 euros, 50 euros por debajo de la cuantía en vigor en aquel momento.
El 75% de los españoles valora positivamente la subida del SMI
Pese a las reticencias de algunos sectores a la hora de subir los salarios, la mayor parte de los españoles valora positivamente esta medida. Según el barómetro de laSexta publicado a finales de enero de 2024, un 75% de los encuestados está a favor de esta medida, mientras que además el 63% considera que el aumento del SMI no tiene por qué impulsar la destrucción de empleo.
¿Afecta la subida del SMI al empleo?
Esta ha sido una de las críticas más frontales a las subidas del salario mínimo interprofesional. En los últimos años, economistas y empresarios han sido muy duros con este tipo de medidas, alegando que no solo destruyen el empleo sino que lo precarizan. Mientras, otros, como la sindicalista Afra Blanco, insisten en que ese debate está más que "superado" y que ahora la duda se centra en cuánto hay que subir ese SMI, dando por hecha la subida.
Los datos históricos no avalan estas críticas. Según una reciente radiografía del SMI de laSexta Clave, en los últimos seis años —con subidas del 22%, 5,5%, 1,6%, 3,6%, 8% y 5%, la última—, el número de afiliados a la Seguridad Social ha pasado de 19 a 20 millones, mientras que el producto interior bruto (PIB), a excepción del bajón de 2020 provocado por la pandemia, no ha dejado de subir.
La licencia urbanística también es necesario
Frenazo del Supremo a la marcha sobre ruedas de las casas móviles en España
El detonante Un litigio entre el Ayuntamiento de Tarragona y una empresa que pretendía instalar estos alojamientos en un camping como si fueran remolques ha hecho pronunciarse al Alto Tribunal.