Diego Schwartzman enloqueció y protagonizó uno de los momentos más tensos con el juez de silla en su partido ante el tenista ruso Karen Khachanov. Una decisión del colegiado en el encuentro correspondiente a la primera ronda del torneo Masters 1.000 de Montecarlo provocó un ataque de ira del tenista argentino.

Schwartzman perdió los nervios cuando el árbitro señaló 'buena' una bola que claramente vio 'mala'. Tras la señalización, el número 16 del mundo reaccionó con un tremendo grito que sorprendió a todos los aficionados presentes en las gradas y al propio juez de silla, que bajó a la pista para señalar la marca de la pelota y explicar su decisión.

El argentino, lejos de arrepentirse, estaba convencido de que esa bola había botado fuera. "¡No!", gritó enfurecido Schwartzman ante el "es buena Diego tío" del colegiado. "Es mala. Se ve desde acá. Es mala. ¿Cómo que no? ¡Hay polvo, hay polvo, es mala! ¿Cómo hay polvo si la pelota toca la línea?", añadió.

Cabe recordar que al ser un torneo de tierra batida no existe la opción de acudir al ojo de halcón ni a la tecnología para revisar ninguna de las jugadas. No obstante, durante la retransmisión, la televisión mostró que 'Peque' tenía razón y era mala.

Schwartzman se fue 'de rositas' y no recibió ningún tipo de aviso ni sanción por su actitud. En lo deportivo, el argentino se ha colado en los dieciseisavos de final de Montecarlo, donde ya le espera el húngaro Marton Fucsovics tras imponerse finalmente a Khachanov en un partido muy competido e igualado (6-7, 3-6, 3-6).