Osaka, de 20 años, es la primera tenista japonesa que gana un torneo del Grand Slam, y deja su marca en 2-0 en los enfrentamientos que ha tenido con la mejor tenista del mundo. La nueva campeona se lleva un premio en metálico de 3.800.000 dólares, mientras que la finalista ganó 1.850.000 dólares.