El dopaje ha atizado al tenis femenino tras el estallido del caso protagonizado por Simona Halep. La jugadora rumana fue sancionada el pasado martes por la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) con cuatro años sin poder jugar debido a que dio positivo en una sustancia no permitida conocida como Roxadustat.
Desde que se conoció la noticia muchos integrantes del mundo del tenis han dado su opinión sobre lo sucedido. Uno de ellos ha sido Nick Kyrgios, habitual participante en los debates sobre el deporte de raqueta. El australiano ha condenado la decisión de la jugadora y ha aprovechado para lanzar un dardo envenenado al circuito femenino.
El de Canberra respondió a través de sus redes sociales a Maria Sakkari, número nueve del mundo, después de que esta criticara el funcionamiento de los test antidopaje: "Yo juego con plátanos y coca cola en batallas de cinco sets, y mi récord habla por sí solo".
"Quizás las tenistas deberían dejar de tomar cosas turbias. Deberían mirarse al espejo al final del día y decir ‘Sí, hice lo correcto’. No es tan difícil", añadió.
Estas declaraciones no dejaron indiferente a nadie y varios usuarios atacaron a Kyrgios por sus palabras. Como es de costumbre, Nick no se ha mordido la lengua y ha contestado a sus críticos dejando una afirmación bastante impactante:
"Me imagino que si yo tomase cosas similares para que me castigasen con cuatro años, tendría cinco Grand Slam", ha expresado.
El australiano vuelve a estar en el foco mediático del tenis mientras atraviesa su peor calvario como jugador profesional. Las lesiones le han impedido jugar este año y no se sabe con certeza cuando podrá volver a las pistas.
