El mundo del tenis vivió un día para olvidar en el ATP 250 de Estoril. Los protagonistas: Benoit Paire y el público presente en las gradas del torneo portugués. El tenista francés, nunca exento de polémica, mostró su trasero a los espectadores, un gesto conocido popularmente como un 'calvo', en una clara falta de respeto.

Paire no solo peridó los papeles y los nervios, sino también su partido correspondiente a la primera ronda ante el surcoreano Soonwoo Kwon (6-4, 7-5). Fue al término del encuentro, tras saludar a su rival, cuando el francés decidió despedirse del público presente con este obsceno gesto.

Es cierto que la actitud y el comportamiento del número 60 del mundo es reprochable. Se le pudo ver durante todo el partido jugando sin ganas y sin intensidad, lo que despertó el enfado general de la grada, que reaccionó con numerosos abucheos y silbidos.

No obstante, reprochables son también las amenazas de muerte e insultos que mostró el propio Paire posteriormente en sus redes sociales. "Como no ganes esto aquí estás muerto, puta escoria, date por muerto, te vamos a asesinar", se puede leer en algunos de los mensajes dirigidos al tenista.

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