Muy a su pesar, la jugadora de fútbol australiano Tayla Harris ha sido víctima de acoso sexual en redes sociales por una foto suya. Suspendida en el aire, en plena acción, tras patear el balón.
Una espectacular imagen que una televisión publicó en su Facebook. Lamentablemente se llenó de comentarios obscenos, sexistas e incluso homófobos.
Harris denuncia que esos comentarios son "abuso sexual". La propia Tayla subió la imagen a su cuenta de Twitter, llamando "animales" a los acosadores.
Un escándalo machista que ha saltado a los principales informativos. Hasta el gobierno australiano se ha pronunciado acerca de la polémica, llamando "gusanos" a los que comentaron la foto.
Tras la avalancha de mensajes ofensivos, la televisión borró de su Facebook directamente la foto, pero más tarde la volvió a publicar pidiendo disculpas. Miles de aficionados al fútbol australiano aplauden la foto de Tayla, pero la palma se la lleva un fan que se la ha tatuado en el antebrazo.
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