Una escalada que pudo terminar en tragedia. Estos dos escaladores desafiaron a la naturaleza en pleno Oceano Ártico y terminaron en unas aguas que se encuentran a dos grados de temperatura.

Su intención era escalar un iceberg. Pero no salió como ellos esperaban. Nada más arrancar el ascenso, el iceberg comenzó a hundirse y ambos cayeron. Los gritos desde el barco les alertaron de lo que ocurría.

La imagen es espeluznante. Afortunadamente fueron rescatados de inmediato. Y es que en el agua, a esa temperatura, sólo podrían haber sobrevivido durante no más de treinta minutos.

Es el intento de escalada sobre hielo más extrema que, por supuesto, no ha podido ser completada. Ambos se jugaron la vida en una acción que algunos consideran temeraria.