Las imágenes dan miedo. Un joven de 21 años se cuela con su vehículo en un rally de Asturias... y sus imprudencias ponen en peligro a todos los espectadores que se habían reunido para ver la carrera.

Firma derrapes y trompos como si fuera un participante más. Sin importarle el estado del vehículo. De hecho, en las imágenes se aprecia cómo rompe las protecciones y destroza las cercas junto al trazado del circuito.

Incluso terminando destrozando el coche. Tras acelerar durante varios segundos en un mismo punto, el motor llega a su final. El joven, lejos de preocuparse, se coloca encima del coche con las manos en alto, celebrando lo allí ocurrido mientras los espectadores le abuchean y le recriminan sus imprudencias.

La Guardia Civil le ha imputado por un delito contra la seguridad vial y podría perder el carné de conducir por un tiempo estimado entre 12 y 24 meses.