El accidente de tráfico que sufrió Tiger Woods el pasado mes de febrero en Los Ángeles marcó un antes y un después para el golfista estadounidense.

El exnúmero 1 ha señalado en una entrevista en la revista 'Golf Digest' que "nunca" volverá a ser el de antes, por lo que lo más "realista" es dejar el golf a tiempo completo.

"Creo que lo más realista es jugar un torneo del PGA Tour algún día, pero nunca más a tiempo completo. Tendré que elegir. Es una realidad desafortunada, pero es mi realidad. La entiendo y la acepto", ha señalado el ganador de 15 Grand Slams.

Nueve meses después del accidente, Woods sigue recuperándose de unas secuelas que le dejaron al borde de la amputación de su pierna derecha: "Hubo un momento en el que, no diría que al cincuenta por ciento, pero estuve jodidamente cerca de salir del hospital solo con una pierna".

El golfista, a sus 45 años, cree que no tiene nada que demostrar: "No tengo que competir y jugar contra los mejores jugadores del mundo para tener una gran vida".

"Tras mi operación de espalda en 2017 fue como si tuviera que escalar el Everest una vez más. Tenía que hacerlo y lo hice. Esta vez no creo que tenga ya el cuerpo para escalarlo y está bien. Puedo participar del golf y, si mi pierna está lo suficientemente bien, quizá pueda jugar un torneo aquí o allá. Pero subir arriba de la montaña de nuevo no creo que sea una expectativa realista para mí", ha añadido.

Por último, el 'Tigre' ha explicado que "sigue progresando" en el marco de un proceso "duro" donde "la paciencia" será un factor clave: "Sé que eso es fácil de decir pero difícil de hacer".