Incrédula situación la vivida en el Triatlón de Sagunto. Al corredor Mateo Bustos se le escapó la victoria de forma incomprensible cuando llegaba a la meta. Y es que una relajación le costó la victoria.
Cuando se encontraba a escasos metros del final de la carrera, Bustos comenzó a celebrar el triunfo. El atleta empezó a frenarse sin saber que segundos después, Germán Míster, que iba en segunda posición, terminaría adelantándolo realizando un último sprint para ganar la carrera.
Bustos celebró antes de tiempo una victoria que parecía que tenía en el bolsillo, pero que un error y una temprana celebración le privó de subirse a lo más alto del podio.