La MLB, la principal liga de béisbol norteamericana, y el resto de ligas profesionales retirarán la marihuana de su lista de sustancias prohibidas y su consumo recibirá un tratamiento igual al del alcohol, con una evaluación obligatoria y un tratamiento voluntario para aquellos jugadores que hagan uso de ella.

Además, se realizarán pruebas de opioides y de cocaína. Estos cambios responden a un nuevo acuerdo alcanzado entre la MLB y la MBLPA (Asociación de Jugadores), respecto a las medidas antidopaje.

Respecto a las pruebas para detectar el uso de opioides y cocaína, cabe destacar que a aquellos jugadores que no cooperen se les sancionará de manera disciplinaria. Estas pruebas, hasta ahora, se limitaban a sustancias para mejorar el rendimiento, además de estimulantes prohibidos.

El detonante de esta medida fue el fallecimiento, el pasado 1 de julio, de Tyler Skaggs, jugador de Los Angeles Angels, cuyo cuerpo fue hallado en la habitación del hotel en el que se hospedaba su equipo poco antes de la serie que le enfrentaba a los Texas Rangers. Skaggs perdió la vida a los 27 años, ahogado con su propio vómito tras haber ingerido alcohol y medicamentos para mitigar el dolor como el fentanil y la oxicodona.

"La epidemia de opioides en nuestro país es un asunto de gran preocupación para el béisbol de Grandes Ligas. Es nuestra esperanza que este acuerdo, que está basado en principios de prevención, tratamiento, conciencia y educación, ayude a proteger la salud y seguridad de nuestros jugadores", comentó Dan Halem, comisionado adjunto, en un comunicado.