Lo imposible solo es un poco más difícil. Eso debe pensar David Tejeiro, la primera persona en el planeta que logra completar una acrobacia que combina dos deportes extremos. Por un lado, realiza vuelo en parapente, mientras que posteriormente ejecuta un planeo como hombre-pájaro.
Para lograr hacer esta doble acrobacia extrema, Tejeiro ha tenido que entrenar duramente durante cuatro años con el parapente y el traje de alas.
En esta maniobra radical, David corrió muchos riesgos ya que el sistema de liberación del parapente le catapultó a más de 200 kilómetros por hora.
A su vez, es vital medir la distacia con respecto al suelo, de manera que la apertura debe realizarse a 250 metros de tierra.