Cuando Aarón González tenía tan solo 10 años, un coche le atropelló mientras esperaba el autobús escolar. El pronóstico no era muy esperanzador: si salía vivo del quirófano, sería con las dos piernas amputadas.

Sin embargo, Aarón nunca se rindió y con el apoyo de su familia ha conquistado tres títulos nacionales de boxeo olímpico en peso welter.

"Siempre me decían que no podía hacer algo, pero yo decía que sí podía. Luchando, las cosas se pueden conseguir", explica el boxeador a 'laSexta'.

Su historia de lucha y superación conmovió a Carlos Prado, director gallego de cine que ha enfocado su documental 'Devolviendo el golpe' a relatar el ejemplo de Aarón.

El púgil eligió el boxeo para fortalecer los músculos y ganar en movilidad, y ha conseguido ganar cinco campeonatos gallegos.