Adam Bender ha demostrado durante toda su vida que es capaz de superar cualquier barrera. A pesar de los miedos de sus padres, con ocho años comenzó a jugar al béisbol ayudado por sus muletas.
"Gracias a algunos entrenadores maravillosos, encontré el deporte que amaba", asegura el joven Adam Bender en una entrevista a Values.com.
Con el paso de los años Bender continuó probando nuevos deportes, convirtiéndose durante dos temporadas en futbolista federado. El salto al deporte de alto nivel lo consiguió en la lucha, donde ha sido campeón estatal.
Con 17 años, Bender estudia en la escuela de Lexington, donde deporte y educación se han convertido su día a día. La falta de su pierna nunca lo ha detenido en su carrera. Él mismo se declara todo un ejemplo para otros jóvenes que se encuentran ante estos desafíos físicos.
Su próximo proyecto es la creación de una fundación para que todos los niños puedan tener las mismas oportunidades para practicar deportes.