Volar sin alas... y desafiando a la gravedad de esta manera: dejando a su paso un rastro de chispas en el cielo.

Lo ha conseguido Richard Browning gracias a su invento, un traje especial de 30 kilos propulsado por cinco turbinas y que gracias a él puede quedar suspendido en el aire y alcanzar además los 137 kilómetros por hora.

Es su nuevo Récord Guinness de velocidad donde el sistema de control es el movimiento de sus brazos.

Una imagen espectacular desde cualquier ángulo porque el conocido como 'Iron Man' real ha conseguido volar como si de un pájaro se tratase.