El último episodio de violencia ultra se ha producido en Moscú. Varios ultras de CSKA y Spartak de Moscú se citaron en el centro de la ciudad para pelear.
Los ultras se encontraron en la entrada a un bar donde se liaron a patadas y puñetazos. La policía rusa tuvo que intervenir para acabar con la trifulca de forma drástica.