Acaba de empezar el Mundial de Luge, un deporte olímpico de invierno que forma partes de las distintas modalidades de descenso en trineo. Es similar al skeleton a excepción del tamaño del patín, que es más ligero, y de la posición del piloto, que va boca arriba. Además no tiene frenos y se controla mediante unas bridas y utilizando el propio peso de su cuerpo.
Hacer un descenso en este trineo de cuchillas es solo para los más atrevidos, porque cogiendo velocidades de hasta 150 km/h, todo se puede torcer en cualquier curva. Cuanto más calientes los patines, más rápido se deslizará sobre la nieve.
Existe dos modalidades: la individual y la de dobles. Para ser el ganador de la competición hay que ser el más rápido de cuatro descensos en solitario y de dos descensos en pareja.
Como ya hemos comentado, acaba de comenzar el campeonato del mundo que no terminará hasta marzo.