Fernando Alonso ha terminado la segunda etapa del rally Dakar después de sufrir un auténtico infierno en las dunas de Arabia Saudí. El asturiano, que comenzó de forma brillante el día, chocó con una roca y eso provocó problemas en un neumático delantero y en la suspensión. Tras repararlo, tanto él como Marc Coma llegaron a su destino.

"En general buenas sensaciones y contento de seguir en el Dakar. El objetivo es terminarlo y llegar hasta el final. La parte negativa es el resultado", comentó Fernando.

Alonso, además, dejó un pequeño zasca a la prensa, cuando afirmaron que le veían bien y que pensaban que estaría más contrariado: "Bueno, eso es lo que vendéis"

Y es que Fernando busca, en primer lugar, acabar y disfrutar de un Dakar en el que ya ha aprendido muchísimo en apenas dos días. En la primera jornada, cuando firmó un notable undécimo puesto, sufrió dos pinchazos y problemas en la navegación. En esta segunda, dos horas y media perdidas.

"Tuvimos un percande en la rueda delantera. Perdimos ahí unas cuantas horas pero podemos seguir. Había poca visibilidad y mucho polvo", comentó tras la reparación del problema en su Toyota.

El líder de la general en coches es Orlando Terranova, un 'nuevo amigo' del asturiano, seguido de un brillante Carlos Sainz que busca con Mini el que sería el tercer Dakar de su carrera.