Pocas acciones tan peligrosas como esta se recuerdan en una competición de motor. Sucedió en la NASCAR, en la vuelta 173 de una prueba a 250, cuando Dawson Cram trató de adelantar por el interior a Joey Gase. En ese momento, el Chevrolet número 35 se fue directo al muro en un accidente bastante fuerte que arrancó parte de su parachoques trasero.

Cabreadísimo estaba el de Iowa... y lo dejó más que claro. Cuando la prueba estaba en 'caution', se bajo de su coche para recoger parte de la carrocería que se desprendió del mismo en el accidente.

Entonces esperó a su rival. Pacientemente, con la pieza en la mano. En cuanto apareció por la curva fue y le lanzó la pieza de su coche.

Acertó de lleno, pero el capó y el cristal evitaron que sucediera nada. A pesar de todo lo sucedido, la NASCAR ni sancionó ni hizo declarar al piloto.

"Simplemente no tenía la cabeza en su lugar. Sé que Johnny Davis no está en el negocio par destrozar coches... y nosotros tampoco", dijo el del equipo Joey Gase Motorsports.