Si existen los milagros, Arón Canet ha vivido uno en el GP de Portugal. El piloto del Aspar Team de Moto2 se ha salvado de lo que podía haber sido de uno de los días más trágicos en la historia del motociclismo esquivando hasta a siete motos tras caerse en la clasificación de Estoril
Y es que fue máxima la tensión, y el miedo, que sufrió el español del Aspar Team. Tras dejar ir a su moto después de una caída en Estoril, Canet vivió en su propia piel el verdadero significado de jugarse la vida.
De ver pasar todo lo vivido delante de tus propios ojos como si fuera una película. Fue así porque, cuando cayó, hasta seis motos que llegaban por detrás pasaron cerquísima de él a toda velocidad.
Sin margen alguno para maniobrar y para cambiar de dirección. Sin opción alguna para esquivar, por ellos mismos, a Canet hasta que pudiera salir indemne de la pista.
El español, demostrando unos reflejos extraordinarios, logró esquivar a todas las motos para salvar su vida.
Podía haber sido uno de los días más negros de la historia del motociclismo, pero Arón Canet, en una exhibición de reflejos, salió ileso de una peligrosísima situación en la pista lusa de Estoril.