El piloto de Repsol Honda Marc Márquez evitó mezclar la política con el deporte y afirmó este sábado en Cervera, en la celebración de su quinto título de MotoGP, que prefiere estar en contacto directo con los aficionados que interactuar con ellos desde el balcón del Ayuntamiento.

"Prefiero emplear el tiempo firmando autógrafos o dar dos besos a quien me lo pide a que mis aficionados me vean de lejos en el balcón del Ayuntamiento", explicó.

Como ya hiciera en la celebración del año pasado, Márquez no salió al balcón consistorial, donde está colgada una pancarta de apoyo a los políticos catalanes presos, pese a que hoy finalmente fue retirada para la ocasión. Marc Márquez se refirió a este hecho con su habitual sonrisa y se desmarcó de cualquier polémica.

"No debemos mezclar temas porque estamos celebrando una gesta deportiva. Estamos viviendo un momento muy dulce y sólo quiero hacerlo rodeado con los míos en las calles de Cervera", explicó el de Honda.

El catalán, a quien tras la recepción institucional le espera esta tarde el ya tradicional recorrido por las calles de su pueblo, explicó que su única intención en esta celebración es la de "ser lo más cercano posible".

"Estoy ansioso de poder llegar a la plaza y al escenario y estar el máximo tiempo posible con mis aficionados", sentenció.