Max Verstappen no puede dejar de pensar en competir. No puede dejar de pensar en la velocidad. En correr. Donde sea y como sea. Tras dominar con puño de hierro en la Fórmula 1 en este 2023, y ganar el Mundial de manera incontestable, el neerlandés estuvo en la gala de la FIA para recoger su premio... y para demostrar que todo lo que sea conducir le apasiona.

Ya sabemos que es un habitual de los eSports. Que en cuanto sale del coche se mete en el simulador y no para hasta alcanzar la perfección. Sí, todo muy 'realista'... pero también le gusta la conducción más 'arcade'.

Porque en la gala de la FIA se le vio echándose unas partidas con los chavales del karting a uno de los juegos de velocidad más vendidos de los últimos años. A la octava, más o menos, entrega de un auténtico clásico de los videojuegos de Nintendo.

Exactamente, se le pudo ver compitiendo con el Mario Kart 8 Deluxe de Switch, un videojuego que le hizo echarse unas buenas risas con la chavalada de las categorías del karting.

En pantalla, Donkey Kong y Luigi, siendo por la posición en el sofá más que posible que su personaje fuera el hermano de gorra verde de Mario.

A saber cómo terminó la partida... o la competición, porque conociendo a Verstappen a buen seguro no le gusta perder ni en el Mario Kart. Y seguro que no teme al caparazón azul.