No es la primera vez que lo hace, pero Sebastian Vettel nunca ha sido tan contundente a la hora de promulgar su activismo medioambiental.

Tras la Carrera de Campeones en la que ha participado en Suecia junto a Mick Schumacher, el tetracampeón del mundo de Fórmula 1 ha explicado en el 'Corriere dello Sport' un "problema muy grande" que puede acabar con la F1.

"Creo que si queremos continuar con este deporte en el futuro y cultivar nuestra pasión por las carreras, tenemos que pensar en alternativas", ha señalado en relación a una búsqueda hacia la sostenibilidad en el 'Gran Circo'.

De hecho, de no acometerse la evolución que pide el alemán, alerta de un futuro negro: "De lo contrario, podemos seguir haciendo las cosas como estamos acostumbrados durante unos cuantos años más antes de que nos encontremos con un problema muy grande. Así que es bueno ver que la gente piensa en cómo crear un futuro sostenible".

"Me encanta el automovilismo y soy muy prudente de cara al futuro. Tenemos pilotos jóvenes, yo tengo mis propios hijos, y realmente siento que es un privilegio experimentar el mundo del automovilismo de la forma en que lo hice. Sería una pena que algún día se prohibiera", ha añadido el expiloto de Aston Martin, que dejó su asiento a Fernando Alonso tras su retirada.