Todos miran a Fernando Alonso. Esa es la realidad. Max Verstappen es el líder del mundial. El segundo es el otro Red Bull, el de Sergio Pérez. Pero el hombre del que más se habla es el del piloto de Aston Martin, que a sus 41 años sigue dejando a todos con la boca abierta.

El asturiano puede lograr este fin de semana en el Gran Premio de Australia algo que no consigue desde hace una década: sumar tres podios consecutivos en una misma temporada. Lo hizo en Bahrein, en Arabia Saudí... y ahora luchará por ello en Albert Park.

Fue en 2013, con los colores de Ferrari, cuando Alonso logró subir al cajón tres veces consecutivas: en Bélgica, en Italia y en Singaour. Esa temporada logró el subcampeonato por detrás del Red Bull de Sebastian Vettel.

Alonso ha comenzado el fin de semana de Australia con buenas sensaciones. Un cuarto y un primer puesto en los entrenamientos libres del viernes, el último pasado por agua y en el que el Aston apenas rodó 13 vueltas.

La clasificación, este sábado a las 07.00 (hora española), se espera que sea en seco. Las condiciones que ha pedido el asturiano, que sabe que su coche es muy competitivo y no necesita 'milagros' para estar en cabeza.

La pole será su gran objetivo y no sólo se medirá a los Red Bull para conseguirla. Porque Charles Leclerc con su Ferrari está ahí. Lo que demuestra que Carlos Sainz también podría aparecer el sábado. La incógnita, como casi siempre, es la del equipo Mercedes.