Es el asiento más caliente de la Fórmula 1. Todo el mundo habla de ello. El equipo Renault busca un sustituto para Daniel Riccierdo... y, de momento, no lo ha encontrado. Aunque todo se podría acelerar en las próximas semanas con el comienzo oficial de la temporada 2020.

El equipo galo se debate entre dos opciones: apostar por los jóvenes talentos de la fábrica o tirar la casa por la ventana con el regreso de Fernando Alonso al equipo con el que se proclamó campeón en 2005 y 2006.

Cyril Abiteboul, jefe de Renault, se ha referido en una entrevista a 'Motorsport' de estas opciones y ha elogiado a los jóvenes pilotos de la marca gala: Guanyu Zhou y Christian Lundgaard.

"Queremos ver cuál es el ritmo de Guanyu Zhou, y cuál es el ritmo de Christian Lundgaard. Podrían ser opciones fantásticas. Hablar de eso ahora es un poco audaz, pero ¿quién sabe? Con una temporada más de F2 para los dos, podría ser la decisión correcta y ese es el tipo de cosas que no se pueden decidir cuando todo se aceleró con Daniel", asegura.

Problemas económicos

Una opción real para el equipo y, claro, más asequible económicamente. Y es que la marca no pasa por su mejor momento ya que en las últimas semanas ha suprimido un total de 15.000 empleos en sus fábricas en todo el mundo.

"Si despides a muchas personas y trabajadores para luego gastar tanto dinero en fichar a Alonso te arriesgas a que haya una revolución. Los sindicatos pueden preguntar por qué estas echando a gente", apuntó en su momento Marco Andrea Zecchi, el que fuera manager de Ferrari en la década de los 90.

Cambio de reglamento

Pero Fernando Alonso es una opción segura. El cambio de reglamento a partir de la temporada 2022 podría abrir una vía al equipo francés para volver a luchar por el título, tal y como hiciera en 2005 y 2006. Entonces aquel cambio de reglamento aupó a un Alonso incontestable sobre la pista.

¿Arriesgará Renault con los jóvenes o irá a apuesta segura con Alonso? La decisión se conocerá en las próximas semanas. El regreso del español a la Fórmula 1, su gran deseo, está en juego.