Max Verstappen es campeón del mundo de Fórmula 1. Es bicampeón del mundo de Fórmula 1. El neerlandés logró su segundo título gracias a una victoria en un caótico GP de Japón que acabó de la forma más confusa posible. Porque ni él sabía que tenía un nuevo Mundial en sus vitrinas.

Y fue lo que se vio en la ceremonia de antes del podio. En las entrevistas, ni idea tenía. Luego lo celebró, pero sin mucho convencimiento, cuando se enteró de que Charles Leclerc tenía sanción. En su charla justo antes de ir al cajón fue más que evidente.

Estaban Verstappen y Sergio Pérez, su compañero en Red Bull, sin saber si sí era o si no era campeón. El neerlandés, directamente, le dijo que no. Pero sí, sí lo era.

Porque los puntos que se le sumaron, a él y a todos, fueron todos a pesar de haber competido tan solo 40 minutos sobre Suzuka. La FIA da la carrera por terminada, no por suspendida, y por ello el reparto de puntos ha sido total.

"No sabíamos cuántos puntos se sumaban por ganar. Cuando nos dijeron que eran todos, y que Leclerc tenía cinco segundos de sanción...", dijo en 'DAZN'.

El neerlandés, de esta manera tan extraña, se proclamó campeón del mundo en Japón y sumó, donde quería Red Bull por ser la casa de Honda, su segundo título de la F1.

Llegará a Estados Unidos con los deberes hechos, tras un Mundial de diez en el que no ha tenido rival alguno más que la fiabilidad en las primeras pruebas del campeonato.