Quien piense que el Gran Premio de Estados Unidos ha terminado, está muy equivocado. A pesar de que la bandera a cuadros ondease hace horas, el ritmo en los despachos y garajes no cesa con un protagonista claro: Fernando Alonso.

Su accidente con Lance Strolly todo lo que vino después sigue coleando porque, terminada la carrera, la FIA decidió sancionar al bicampeón del mundo de Fórmula 1 con un 'Stop&Go', que en ejecución poscarrera son 30 segundos de penalización.

¿El motivo? Haas reclamó que el de Alpine regresó al trazado de Austin con el coche en malas condiciones, lo que derivaba en un problema de seguridad.

La realidad es que el retrovisor derecho de Alonso salió despedido en su adelantamiento a Kevin Magnussen, pero también es cierto que en ningún momento los comisarios le mostraron la bandera negra y naranja al oventense para que se detuviese.

Es por ello que, a modo de reclamación ante la decisión de la FIA, Alpine ha dado dos argumentos de peso que podrían hacer al organismo rector retractarse de su decisión y dejar 7º a Fernando.

En primer lugar, la protesta de Haas se presentó fuera del tiempo reglamentario y, por otro lado, Jo Bauer, delegado técnico de la FIA, afirmó que el coche era legal tras la carrera.

El artículo 13.3.5 del Código Deportivo Internacional dice que las protestas se deben presentar "no más tarde de 30 minutos después de la publicación de la clasificación provisional, salvo en circunstancias en las que los comisarios consideren que cumplir con los 30 minutos sea imposible", y se presentó 24 minutos fuera de tiempo, algo que los propios comisarios reconocieron.

En un comunicado, Alpine clama al cielo: "El equipo también cree que debido a la protesta presentada 24 minutos tras la hora límite especificada no debería aceptarse, así que la penalización debería considerarse inválida. Como resultado de esto, el equipo ha protestado la aceptación de la protesta original de Haas".

La ausencia de la bandera negra y naranja, la demora de la protesta de Haas, la afirmación de Jo Bauer... varios son los argumentos de Alpine para que la FIA revoque su sanción a Fernando Alonso, aunque por todos es sabido que los comisarios no suelen caracterizarse por su capacidad para retractarse ante los errores propios.

El bicampeón, que arrancó 14º tras entrar en Q3, alcanzó el séptimo lugar, cayó a los 'infiernos' después del choque con Stroll, regresó al sexto, terminó en séptima posición... y quedó relegado al 15º lugar tras la sanción de la FIA. Ahora, es turno del organismo de analizar lo ocurrido, pero la realidad es que, con los argumentos que presenta Alpine, la sanción podría quedar anulada... si se reconoce un error propio, hecho que en Fórmula 1 no suele ocurrir.