Tras un fin de semana discreto de Aston Martin y Fernando Alonso en Bahréin, los de Silverstone han arrancado el Gran Premio deArabia Saudí como un tiro.

En los Libres 1, el bicampeón del mundo de Fórmula 1 quedó segundo tras Max Verstappen, pero en la sesión vespertina, la que se celebró a la hora a la que será la clasificación y la carrera, el asturiano quedó primero a dos décimas de George Russell y tres del neerlandés.

¿Es candidato a la victoria?, ¿tanto ha mejorado Aston Martin en una semana?, ¿las mejoras funcionan? A priori, parece que nada más lejos de la realidad.

Como le ocurrió a Ferrari en 2023, Aston Martin ha confeccionado un monoplaza muy rápido a una vuelta, pero que devora los neumáticos en tandas largas.

Además, en los Libres muchos equipos esconden sus cartas y esas décimas de ganancia pueden variar en función de las cargas de combustible o los mapas de motor.

Tras los FP2, Pedro de la Rosa, embajador de la escudería de Silverstone, reconoció que el AMR24 sufre "bastante degradación", por lo que "a una vuelta va bastante bien, pero en tanda larga soy más cauto".

Alonso, por su parte, dejó entrever que la primera posición es irreal: "Somos más rápidos en los entrenamientos libres que en la clasificación. Creo que aplicamos una estrategia diferente, en términos de cargas de combustible, mapas de motor...".

Todo apunta a que Fernando y Aston serán competitivos en la clasificación de este viernes, pero deberán realizar una excelente gestión de neumáticos el sábado para tener opciones de luchar por el podio. En tandas largas, a partir de la vuelta 10, tienen una importante brecha con respecto a Red Bull, Ferrari, Mercedes y McLaren.