Sin duda, la polémica del fin de semana en Fórmula 1 se resume en el accidente entre Fernando Alonso y Lewis Hamilton en la primera vuelta del Gran Premio de Bélgica.

Después de que el británico cambiara de trazada y chocara contra el Alpine, el asturiano estalló por radio y llamó "idiota" al que fuera su compañero en McLaren en 2007.

Ese comentario fue el motivo por el que Lewis no se disculpó personalmente con Alonso a pesar de asegurar que la "culpa" había sido suya.

Desde entonces, muchas voces autorizadas del 'Gran Circo' han debatido sobre lo que se puede decir o no por radio, o lo que debería retransmitir o no la Fórmula 1.

Uno de los que ha opinado ha sido Carlos Sainz, que esta temporada ya fue protagonista en el Gran Premio de Gran Bretaña con un 'stop inventing' que ya parece ser historia del automovilismo español.

Es por el incidente en Silverstone que el '55' sabe cómo se pueden tergiversar las conversaciones: "Por la intensidad que suena en la radio, sí. Yo siempre que me escucho sueno más cabreado, mucho más intenso, mucho más presionado creo que es la palabra de lo que realmente estás intentando transmitir al equipo".

Para restar hierro al asunto, Sainz ha elucubrado con qué pasaría y qué se escucharía si futbolistas y entrenadores también llevaran un micrófono durante todo el partido.

"Ahí yo siempre pongo el ejemplo que imagínate que le pusiésemos un micrófono a Ancelotti y a los jugadores, mientras que juegan al fútbol las cosas que se dirán, la de insultos que habrá, no me lo quiero imaginar...", ha apuntado en 'DAZN'.

"Nosotros tenemos un micrófono puesto durante los momentos de más alta presión y ahí es donde creo que se sacan las cosas un poco de contexto porque estás en los picos de presión. La discusión tiene que estar, incluso en la radio, incluso si te oye toda España o todo el mundo, tiene que haber una discusión y tiene que ser así y tiene que ser por el bien de tomar una decisión mejor", ha zanjado.