Pepe Martí correrá en Fórmula 2 la temporada que viene. Lo hará con Red Bull después de sus reuniones públicas con Helmut Marko. Una oportunidad de oro para lucirse y para convencer a la escudería de las bebidas energéticas. Tiene muy claro que su objetivo a largo plazo es convertirse en piloto de Fórmula 1.

En una entrevista a 'El País' ha hablado de sus objetivos y su trabajo diario para alcanzarlos: "La autoexigencia es algo que se me ha enseñado en casa desde pequeño. Quiero hacer la última vuelta que haga la diferencia y poder ganarlos a todos. Mi objetivo es la F1, y voy a hacer lo que pueda por llegar allí".

"Yo no estaría aquí si no creyera que tengo posibilidades de llegar a la F1. Tienen que alinearse muchas estrellas, es difícil tener un asiento en la categoría reina. Ojalá, algún día, ser campeón de la F1", detalla el pupilo de Fernando Alonso. 

Su 2023 ha sido una temporada de ensueño con varias victorias al volante del Campos Racing: "Ha sido la mejor temporada hasta el momento. En Hungría hice un par de errores en la clasificación. En Spa nos negaron la oportunidad de pelear. Y en Monza fue una carrera totalmente adversa que terminó con dos accidentes".

"Siempre pienso que puedo hacer más. Intento forzarme a mí mismo, porque tiendo a ser un poco vago...", dice Martí.

Es el posible heredero de Fernando Alonso y Carlos Sainz en el automovilismo español. Paso a paso, Martí se acerca a su gran sueño desde que era un niño: convertirse en piloto de Fórmula 1.