Carrera para olvidar. Así definió Fernando Alonso el peor gran premio de la temporada tanto suyo como de Aston Martin, ya que ambos se han quedado sin puntuar una carrera por primera vez esta temporada.

La carrera de Marina Bay fue tan nefasta para Alonso que terminó en última posición después de mostrar un ritmo pobre, hacer una mala parada en boxes, una sanción de cinco segundos y una salida de pista. Todo ello junto acabó con el asturiano en última posición.

Sin embargo, estos problemas podrían tener una justificación. Según publicó la cuenta 'Aston Martin F1 News', Alonso habría roto la carcasa del brazo izquierdo de su suspensión en la vuelta 2, lo que habría vuelto el coche mucho más inestable e inconducible.

Como aparece en la imagen, el brazo de la suspensión tenía dañada la carcasa, lo que habría ralentizado el ritmo del monoplaza británico y ha podido ser el origen de los problemas que han derivado a terminar en la última posición.