Mercedes ha dicho basta. Toto Wolff ha dicho basta. El jefe de las flechas de plata denuncia públicamente la flexibilidad de los alerones de Red Bull después de la victoria de Max Verstappen en Mónaco.

El máximo mandatario avisa: no consentirá estos alerones para el Gran Premio de Azerbaiyan de dentro de dos semanas. Y está dispuesto a denunciarlo en todos los organismos correspondientes.

"Si el limbo técnico de los alerones sigue en Bakú, con la ventaja que eso conlleva, iremos a los comisarios, y si no es suficiente, iremos a la Corte de Apelación Internacional. La FIA debe aclarar las cosas antes de Bakú. Si no, será un caos", afirmó en 'Sky F1'.

"Hemos analizado los alerones y creemos que el de Mercedes cumple con la normativa técnica. Pero no así el de Red Bull, pues su alerón trasero flecta más que lo que debería. Se ha declarado no conforme a las reglas, pero estamos en un vacío legal hasta Bakú", afirmó.

El lío de los alerones continúa después de las declaraciones cruzadas de Red Bull y Alpine, la otra escudería que ha sido acusada de utilizarlos. La FIA de momento no se ha pronunciado de manera oficial.

Wolff, además de quejarse por este motivo, también lamentó el problema en la tuerca de la rueda delantera derecha de Valtteri Bottas, que no pudo terminar en Mónaco.

"Preferiría haber terminado en tercer y séptimo lugar que solo el séptimo, pero hay que encajarlo. Hoy perdimos un par de puntos, o algunos puntos más. Este es un campeonato largo, va a oscilar en ambos sentidos. Al final veremos en Abu Dabi quién saca el morro por delante. Y eso es todo", sentenció.